Las RRPP y las nuevas tecnologías

Las RRPP y las nuevas tecnologías

15 de agosto de 2021 Uncategorized 0

Las profesiones de la estrategia.

Si bien la cuarta revolución industrial es un hecho y, desde el chip mental, todos debemos meternos en sintonía con la transformación digital, como ya es costumbre, nos quedamos en la forma y no nos enteramos o menospreciamos el fondo, cuando es este fondo la esencia de nuestra competitividad.

No importa si estudiaste dos o cinco años, una carrera de comunicación, mercadeo o publicidad en cualquiera de sus variantes, parece ser que tu destino es ser community manager, diseñador gráfico, generador de contenidos y gestor de redes, además de manejar la comunicación interna de una organización, lo que significa la producción de boletines, carteleras o comunicados, y si te sobra un poquito, te debes encargar, además, de la celebración de los cumpleaños y demás eventos.

A las universidades les parece que esto es natural y que no importa mientras te contraten y te paguen el salario, pues el promedio del rubro es de 1.5 salarios mínimos. Todo esto, en detrimento de quienes estudiaron para realizar esas tareas. Como alguien me lo manifestó: «en la práctica, eso no importa y que debemos estar muy agradecidos de que esto ocurra, pues el desempleo profesional es muy alto». Mis bendiciones.

Todavía así, cosas como el Branding y las Relaciones Públicas, no se han desaparecido, también evolucionan y utilizan las nuevas tecnologías, aunque sean estrategias en desuso por un número muy grande de micro, pequeñas y medianas empresas, no así de la gran empresa, que por eso son grandes.

De entre todas las tecnologías que se han potencializado últimamente, en especial aprecio tres: las de inteligencia de negocios, las de inteligencia artificial y las de inteligencia de RPA.

La primera nos brinda información que nosotros, con nuestra formación, convertimos en conocimiento, y las segundas nos permiten crear entornos de aplicación, que por demás se están volviendo extraordinarios; las Robotic Process Automation integradas con IA, independiente de su tamaño, la organización que no las tenga, es sospechosa en su gestión y competitividad, pues convierten las estructuras empresariales en máquinas autocontroladas efectivas que minimizan el error a la vez que permiten que el enfoque de los humanos sea realmente sobre los humanos y no en los procesos.

Lo más interesante es que con una construcción bien hecha, las tres terminan siendo una misma y que podemos usar como un dashboard orientado a okr´s, no sólo a kpi´s.

Esto implica otros niveles de aprendizaje para quienes somos profesionales de comunicación, mercado y publicidad.

Debemos aprender la estrategia contenida en estas tres inteligencias y sus modalidades tecnológicas, no para su construcción, sino como usuarios para la planeación, creación de entornos de aplicación y la obtención de resultados. Si bien no sobra entender algún lenguaje de programación como Python, R o SaS, lo que sí debemos aprender es cómo se cómo se les saca provecho a estas inteligencias.

En ese sentido, se vuelve obligatorio saber cómo usar las herramientas de captura y las de análisis de datos. Aprender cómo se estructuran las relaciones ciber físicas, sus interacciones habladas y de NPL. Aprender a darle usos de investigación y comercio a las funcionalidades de visión y reconocimiento físico que traen las nuevas tecnologías. Aprender la aplicación de las automatizaciones de marketing, y con todo esto aprender a convertir las herramientas y acciones tecnológicas en resultados tanto de relacionamiento como financieros de una organización.

Los nombres de las herramientas son múltiples: Power BI de Azure, People Analytics, Stive.ai, Watson Analytics, y con el pasar del tiempo se volverán más y más. Lo importante aquí, es que los profesionales de comunicación, mercadeo y publicidad, son los profesionales de la estrategia. Usarlos para un mal entendido Marketing Digital, no es sólo un desperdicio de dinero, vuelve a la empresa como un barco sin brújula y, definitivamente, es una pérdida de competitividad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *